Infinitesimal

Sentía que salía por mi piel, se extendía más allá de mi. Una soledad inabarcable. Un abismo infinito que me hacia sentir pequeño. Infinitesimal. Una mota de polvo en tierra desconocida, suspendida en un aire que devora todos esos rincones. Era vértigo. Puro vértigo. Un punto y aparte a mis días. Me arrastraba. Me tragaba. Un pliegue guardado en otro pliegue. Un participio pasado. Un futuro inmediato. Un ahora sin esperas. Me muevo. No puedo parar. 

Sentía. Siento. 

Pude verme desaparecer en ese vacío repleto de mi. En esa extrañeza cargada de noche. Sin medida. 

Era yo. Encontrándome conmigo. El miedo a verme al espejo. Era yo más allá de mi nombre. 

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