Cielo de boca.
Brisa dentada,
desvelos labiales.
Cintura en deriva,
que no quede memoria,
solo sabor a cítricos.
Rituales al cuero
de palabras vacías.
Brazos en marea
de océanos repletos de olas.
Partir las voces.
Dedos, clavículas, costillas,
costumbres óseas
que devoran saliva.