Barro repleto de gusanos

A veces, me pregunto cuántas vidas caben en una vida. Me gustaría estar en todos los lugares. Ser todos los inicios que sueñan mis finales. Plenilunio en una noche de diciembre. Barro repleto de gusanos, una hoja que sobrevive a la helada de la nocturnidad. El punto y seguido del corazón, noche de mi noche, vida más allá de mi vida. Me imagino incandescente, rotando ingrávido en el precipicio de un horizonte de sucesos. Qué queda cuando todo lo que queda no ocupa lugar.

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