A ti que juzgas mis manos con el dedo, a ti que decides la justicia a golpe de pecho sonoro,…
No tengo necesidad de que me sorbas los huesos, de recibir un adiós como un saludo de fondear en vientres…
En este momento que de mí sólo quedas tú, donde comienza y acaba el principio que nos hace únicos para…
Anduve camino a la montaña y me quedé en un punto que no recuerdo. Entre el miedo y la fascinación…
Buscando mi piel en otras manos que me dejen ronco templo de miserias desterradas. Con esta sonrisa quieta que teje…